El pensamiento disruptivo, la semilla para sembrar la innovación como una cultura en la vida y en las organizaciones

ComfamaPro

Si eres ese tipo de persona que se toma la tarea de pensar un poco más allá del porqué de las cosas, de atreverse, de imaginar y de crear formas distintas de desarrollar productos y servicios, y de generar nuevos paradigmas, estás sembrando la semilla para cultivar la innovación en la organización de la cual haces parte.

Juli Mejía es amante de los colores, los lunes y la innovación, pero también es doctoranda en Gestión de la Tecnología y la Innovación, y ejerce como Responsable de Innovación Educativa y Cultural de Comfama. Ella explica que el pensamiento disruptivo es la semilla de la innovación y se compone, a su vez, de tres tipos de pensamiento: creativo, crítico y reflexivo.

Todas las revoluciones que se han presentado en la historia de la humanidad, dice Juli, las industriales, las técnicas y las de cualquier otro tipo, se han basado en cambios de pensamiento y han tenido como protagonistas a personas que se atreven a pensar distinto y a generar impactos a partir de la transformación de productos o servicios.

Este concepto es clave en una era como la que vivimos en la actualidad, cuando recorremos desde hace algunos años la llamada cuarta revolución industrial, la cual ha modificado en gran medida la manera en la que las organizaciones realizan su trabajo.

En la conversación “Cultura de la innovación en la vida y en las organizaciones”, disponible con tu cuenta de ComfamaPro, Juli explica con mayor detalle qué significan estos tres conceptos: pensamiento creativo, crítico y reflexivo. A propósito del Día del Trabajo, te compartimos algunas de sus reflexiones, muy útiles para repensar el modo en el que nos desempeñamos en nuestros oficios y profesiones.

Pensamiento creativo: como su nombre lo dice, este se basa en la creatividad, que se manifiesta en la interconexión de ideas con información. Esto da la posibilidad de ponerlo todo en un mismo lugar, incluso en desorden, y empezar a probar qué cosas pueden suceder en ese ejercicio. No se trata de inventar lo que no existe, pues en realidad pocas cosas nacen de la nada. Esto aplica también para las relaciones humanas, pues podemos darnos la libertad de validar las opiniones del otro, aún cuando no estemos de acuerdo, nos permitirnos recibir información inédita que podemos utilizar para nuestro provecho, en el mismo instante en que sucede o en cualquier otro momento.

Pensamiento crítico:
es la posibilidad que le damos al pensamiento de “no tragar entero” y de cuestionar lo que tenemos a nuestra disposición. No es cuestión de criticar, sino de preguntarse “¿qué pasaría sí…?”. Muchas veces en las labores que desempeñamos no nos damos la posibilidad de preguntarnos por el origen de las cosas o de pensar qué sucedería si se conectan la información y las ideas –lo que ocurre en el pensamiento creativo–. Es ver el mundo con ojos de curiosidad.

Pensamiento reflexivo: consiste en entrelazar los pensamientos creativo y crítico, y darles filigrana. Es darse la posibilidad de reflexionar sobre el origen de sus pensamientos y de la forma en la cual adquiere sus destrezas y habilidades, y de asumir la innovación como una forma de vida.

¿Cómo plasmarlos en las organizaciones?

Juli Mejía explica que, en cualquier caso, las organizaciones son construcciones sociales que buscan cumplir con un objetivo; por tanto, es allí donde el pensamiento innovador y disruptivo debe tener su lugar.

Así, a este se le deben sumar las rutinas y hábitos, y un propósito que permita que tanto los pensamientos como la semilla de la innovación estén atadas a un fin.

Las organizaciones tienen capacidades y habilidades para hacer uso de recursos como personas, tecnología, equipos, infraestructura y presupuestos. Los pensamientos creativo, crítico y reflexivo lo que hacen es potenciarlos y estimularlos, e incluso de favorecer la creación de unos nuevos.

Es allí cuando se configura una cultura de innovación en las organizaciones, al unir una forma de pensamiento con unas rutinas asociadas que ayude a poner en calidad ese propósito organizacional y sacarles mayor provecho a las habilidades de las personas. Es necesario estimular una cultura de innovación para fomentar nuevas rutinas, esto favorece que cualquier persona se apropie de ella, la reconozca y explote sus capacidades en beneficio del propósito y los objetivos de las organizaciones.

Si deseas ampliar estos conceptos, te invitamos a acceder a la conversación “Cultura de la innovación en la vida y en las organizaciones”, con Juli Mejía.

Está comprobado que los trabajadores que son felices en su lugar de trabajo son más productivos y la transformación cultural de las organizaciones debe procurar generar las condiciones que así lo permitan.

De hecho, la firma consultora Great Place to Work, cuyo ranking de las mejores empresas para trabajar es uno de los principales referentes en cuanto a bienestar laboral en el mundo, indica que aquellas compañías que invierten en estos temas logran que sus empleados aumenten hasta en un 31 % su productividad, reduzcan hasta en un 19 % sus errores y sean un 55 % más creativos.

Celebrar y promover el premio a la cultura de las empresas es una de las mejores maneras de conseguirlo. Algunas de las acciones que Great Place to Work sugiere para implementarlas e inspirar a los empleados a ser mejores en sus labores son las siguientes:

Celebrar las victorias: es importante compartir con los empleados los logros y difundirlos por todos los medios posibles, incluyendo los externos, pues así no sólo motivará a quienes ya hacen parte de la empresa, también a quienes quieran hacerlo en algún momento. Es atraer nuevos talentos.

Regalar tiempo: una manera ideal de agradecer los logros y celebrar es ofrecerles a los colaboradores un tiempo adicional para que lo inviertan en lo que consideren, con sus familiares o amigos. Ellos se lo han ganado y los alienta a seguir produciendo y teniendo un buen desempeño.

Vincular a las familias a los logros de la empresa: en la actualidad, cuando muchos empleados laboran desde casa en modalidad híbrida o remota, el cruce de los tiempos entre la vida en el trabajo y la familia se ha incrementado. Por eso, los seres queridos también son parte de las victorias y merecen un reconocimiento.

Por otra parte, algunas empresas han acudido a estrategias innovadoras para fomentar una nueva cultura organizacional. Estos son algunos ejemplos:

  1. Patagonia ha implementado una política de flexibilidad laboral mediante la cual les ha permitido a sus empleados sacar tiempo libre en medio de la jornada para dedicarlo a actividades que disfrutan.
  2. Google tiene una guía llamada “Verdades en Google” donde desmitifica algunos temas como que las personas sin traje son poco serias. Igualmente ha instalado gimnasios, espacios abiertos y colaborativos y restaurantes con menús saludables para fomentar buenos hábitos alimenticios.
  3. La agencia de publicidad 72andSunny les ha ofrecido a sus colaboradores la asistencia de una asesora de vida para apoyarlos en la gestión de sus emociones.
  4. Muchas empresas han creado la Gerencia de Felicidad, convencidas de que el bienestar laboral es un punto clave en su productividad y entendiendo que la mayoría de las personas pasa más tiempo en la oficina que en su casa.
  5. Shopify, la empresa de comercio electrónico, fue una de las empresas que recientemente decidió eliminar las reuniones de sus agendas y, a cambio, destinar ese tiempo para producir. 

ComfamaPro tiene más para ti

Si esta conversación te pareció interesante, no te puedes perder otros contenidos que hemos preparado para acompañarte a transformar la cultura en tu organización. Por ejemplo, si eres un emprendedor y estás en camino de crear tu propia empresa, te recomendamos la masterclass Emprender desde el ser, en la cual la mentora Carolina Alzate te ayudará a conectar primer con tu propósito desde el autoconocimiento y la valoración del ser, para potenciar tus habilidades y aplicar una nueva perspectiva de liderazgo empresarial.
Por otro lado, si estás creando una marca y deseas dejar una huella en tu público objetivo, te sugerimos acceder a la masterclass “Deja huella con tu marca consciente”. En esta, la mentora Ángela Zapata te guiará por un proceso de definición de tu marca, con preguntas claves como ¿mi marca deja huella? ¿Es memorable para mi público? ¿Qué tipo de marca o huella dejo? ¿Marca es igual a imagen corporativa?
WhatsApp

¡Hola! ¿Exploramos juntos?

chatbot
WhatsApp