1. Mide tu capacidad productiva

¿Cuántas horas tienes disponible a la semana? Ya sea que combines tu labor como freelance con un empleo fijo o que te dediques a ella de tiempo completo, es importante que sepas cuánto tiempo tienes disponible para cumplir con tus objetivos. Esto es fundamental, pues de ello dependerá cuánta carga quieras asumir y, por ende, qué cantidad de proyectos estés en capacidad de recibir en un periodo determinado, sea en una semana o un mes, y por último cuántos ingresos vayas a obtener.
Sin importar tu capacidad productiva, lo más importante es que tengas clara tu realidad y trabajar acorde con tu disponibilidad.

2. Aprende a dividir tu tiempo entre lo creativo y lo administrativo Tu tiempo se compone de horas creativas, es decir aquellas en las que te dedicas a trabajar en los entregables de aquello para lo que fuiste contratado por un cliente, y las administrativas, en las que gestionas tu negocio (enviar cotizaciones, cuentas de cobro), las cuales son necesarias en tu carrera como freelance.
Un freelance debe comportarse como una empresa, por tanto, ambas labores son importantes: aunque te contraten por tu labor creativa, lo administrativo marcará el éxito de tu gestión. Sin embargo, tienes que aprender a priorizar responsabilidades y destinarles el tiempo adecuado para que no descuides los entregables que están esperando tus clientes.

3. Calcula tus gastos
Tener a la mano en qué te estás gastando el dinero que te ingresa por tu trabajo es crucial para saber cómo te estás comportando como empresa, pues ello marcará aspectos claves de tu gestión, como por ejemplo la definición de las tarifas por tu trabajo. ¿Por qué? Pues si sabes cuánto necesitas en tu día, tu semana o tu mes, tendrás claro cuánto tendrás que trabajar para poder obtener los recursos que requieres para cubrir esas obligaciones y, por supuesto, para darte uno que otro gusto, porque ¿para qué trabajas, entonces?  

4. Construye un presupuesto
Todo negocio debería hacer esta tarea (y recuerda que, como freelance, estás gestionando tu empresa). Un presupuesto será tu guía para cumplir con tus objetivos y poder hacerles seguimiento a tus expectativas, con el fin de saber si los puedes cumplir.
Una recomendación del mentor es que en este aspecto involucres tanto tus emociones, como tu salud mental y tu vida personal, pues lo indicado es que este presupuesto esté lo más ajustado a tu realidad y aterrizado a tus capacidades como freelance.
No olvides que no solo lo laboral importa: también están presentes tus ocios, tu salud, tus intereses, tus gustos y otras necesidades que requieras atender.
Recurre a programas como Excel u otras herramientas que te ayuden a plasmar en una hoja en blanco este presupuesto. Procura que nada se te escape, todo cuenta (hasta los gastos hormiga, aquellos que crees insignificantes, pero que si los sumas, verás que son importantes).

5. Define la ganancia que obtendrás por tu trabajo
Cuando tienes claros tu capacidad productiva, tu tiempo disponible, los gastos que tienes que cubrir y tu presupuesto, es momento para calcular la ganancia que deseas establecer por tu trabajo. Para dar con este valor existen algunas fórmulas que Carlos Restrepo explica en el curso sobre finanzas básicas para freelance, el cual te sugerimos revisar para que amplíes esta información.

¿Estás listo para romperla como freelance? Esperamos que este contenido te sea útil y siempre te recomendamos ingresar a ComfamaPro para aprovechar los cursos que tenemos disponibles sobre finanzas personales, los cuales te ayudarán a orientar tus gastos y llevar una vida más tranquila.